Fuente: El Periódico de la Energía
Parecía que la construcción de nuevas interconexiones gasísticas por toda Europa iba a ser coser y cantar. La Comisión Europea anunció el pasado mes de noviembre la presentación de una nueva actualización de la lista de proyectos prioritarios llamados PIC o Proyectos de Interés Común, que incluía seis interconexiones de España con Francia y Portugal para completar la Unión de la Energía, cuatro eléctricas y dos de gas.
Para que puedan llevarse a cabo, la Comisión Europea debe presentarlos ante el Parlamento Europeo y como es un acto delegado, se convierte en un mero trámite. En el caso de la primera y segunda lista de proyectos PIC, así fue, pero esta vez no será así.
Diecisiete europarlamentarios, de los cuales cuatro son españoles, han presentado la primera objeción en contra de la lista PCI, más concretamente en contra de los proyectos gasísticos incluidos en ella. Y entre los cuatro diputados se encuentran representantes ecologistas y de izquierdas, como Podemos (Xabier Benito), Izquierda Unida (Paloma López Bermejo) y Equo/Los Verdes (Florent Marceselli), pero también una representación de Ciudadanos de la mano de Carolina Punset.
Según Miguel Angel Capilla, asesor de la comisión parlamentaria europea de Energía para Carolina Punset, “hay dos razones por las que hemos apoyado esta objeción contra las infraestructuras gasísticas, la primera porque el uso de la capacidad instalada es ínfima, en España solo se utilizan los ciclos combinados en un 10% de su capacidad, y en el resto de Europa apenas sube a un 25%” explica, “si tienes una nueva lista PIC donde van a predominar estas infraestructuras, que no dejan de ser combustibles fósiles y por tanto contaminantes, y que tienen una vida útil de más de 40 años, no tiene sentido que se sigan construyendo”.
Además, el representante de Ciudadanos recuerda que “Carolina Punset ha sido una de las diputadas más combativas con la estrategia europea de desarrollar nueva infraestructura gasística que no se necesita, como en el caso del GNL, por ejemplo, la construcción de la regasificadora de El Musel (Gijón), que se hizo y un año después se tuvo que cerrar”.
Hay otra razón. Capilla señala que “también hemos optado por firmar esta objeción porque vemos el poco papel que tiene el Parlamento Europeo a la hora de decidir sobre los proyectos que se incluyen en esa lista”.
Precisamente ésas son algunas de las razones del documento presentado en el Parlamento Europeo, documento al que ha accedido El Periódico de la Energía. El texto firmado por los europarlamentarios se pide específicamente a la Comisión que “presente un nuevo acto delegado que evite la construcción de nuevas infraestructuras de combustibles fósiles con posibles consecuencias de bloqueo y que sea plenamente compatible con los compromisos contraídos en virtud del Acuerdo de París“.
Además pide a la Comisión que “presente la lista de proyectos PCI de forma coherente y transparente con los colegisladores, en particular el Parlamento Europeo”.
Según Xabier Benito, eurodiputado por Podemos, “la objeción que hemos presentado es un texto de mínimos, primero porque teníamos muy poco plazo para presentarla y después porque hay una amplia representación política en la lista de firmantes y teníamos que buscar un consenso”.
Ahora, el siguiente paso es “la votación en la Comisión de Energía (ITRE), que justo se reunió hace dos semanas, con lo que tendremos que esperar al próximo 21 de febrero, que se reúna otra vez, para votar la lista PIC y si no salen los apoyos necesarios, se frenaría la construcción de infraestructuras muy caras e innecesarias”, concluye Benito.