Fuente: Cinco Días
El sector de las energías renovables está preparado para dar el salto a la hibridación: generar electricidad con dos o más fuentes limpias en un solo punto de conexión. La suma del potencial en recursos renovables, sobre todo en lo referido al viento y al sol; el impulso normativo que ha dado el Gobierno, y al que solo le falta el detalle de la regulación, y las ventajas, entre otras, de unir en una misma instalación varias tecnologías en cuanto al ahorro de costes están detrás de este inminente desarrollo.
“Uno de nuestros objetivos es promocionar la hibridación”, asegura José María González, director general de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA). “El potencial es muy alto”, añade, y destaca los “más de 42.000 megavatios renovables sobre los que podría actuarse en nuestro país cuando arranque”.
Las ventajas son numerosas. La más importante es el ahorro en los costes de inversión y de generación de energía, entre un 10% y un 15%, según cálculos de Heikki Willstedt, director de políticas energéticas y cambio climático de la Asociación Empresarial Eólica (AEE). González señala otras, como “el aprovechamiento del espacio y de las infraestructuras eléctricas, la reducción del impacto ambiental, el ahorro en trámites administrativos y lograr un suministro más estable y de mayor calidad”.
El sol es “la tecnología troncal para hibridar por su facilidad, sencillez y bajo coste”, afirma González. Willstedt apunta que la fuerza del sol sumada al viento –“esperamos añadir 2.000 megavatios de fotovoltaica a los parques eólicos ya existentes”–, al agua, a la biomasa, a la geotermia, etc., “es el nuevo concepto de energía renovable”, y la define como “nudos o centros de conexiones donde, como en un mecano, se van poniendo diferentes tecnologías”.
El sector cuenta desde junio con un real decreto ley que regula este tema. “Es ya una realidad normativamente”, indican fuentes del Ministerio de Transición Ecológica. Solo queda que el Gobierno saque próximamente otro real decreto que regule y detalle cómo ha de llevarse a cabo esa hibridación. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) emitirá también una circular definiendo esa regulación desde el punto de vista administrativo.
Planes y proyectos
Hay una sola instalación en la Península que comercializa la energía que genera uniendo biomasa y termosolar. La gestiona Comsa Corporación en Les Borges Blanques (Lleida) y cuenta con una potencia de 22,5 megavatios. A ella hay que sumar la que se crea en la isla de El Hierro con viento (11,5 megavatios), agua (11,32 megavatios) y almacenamiento.
Acciona ha desarrollado en el parque eólico de Breña (Albacete), un proyecto de innovación pionero que consiste en recubrir la superficie de un aerogenerador con paneles fotovoltaicos flexibles y orgánicos para el consumo de la turbina, informan fuentes de la compañía.
Endesa trabaja en varios proyectos que suman la energía fotovoltaica con distintas tecnologías de almacenamiento. Baterías para guardar 160 MW en Andorra (Teruel); 6,1 MW en Palma de Mallorca con tecnología de litio sólido; en Canarias, uniendo fotovoltaica con acumulación usando varias técnicas de flujo, y en Extremadura, en este caso, utilizando la tecnología del litio, señalan fuentes de la empresa.
Iberdrola se ha metido de lleno en la hibridación con un gran proyecto ya en marcha en Australia. Se trata de una inversión de 500 millones de dólares australianos (unos 300 millones de euros) para generar 317 MW entre eólica y fotovoltaica.
Naturgy está investigando la suma de renovables y sistemas de almacenamiento en el parque eólico de La Vega (Zamora) con baterías de flujo Redox de vanadio y en la subestación de distribución de Alcalá con pilas de litio-titanato.
Y Ence ha iniciado este mes los trámites para hibridar la planta de biomasa de Puertollano (Ciudad Real) con otra termosolar cercana y para una segunda instalación de biomasa en la misma localidad.