FUENTE: El Economista
La Unión Europea (UE), Rusia y Ucrania cerraron el sábado un acuerdo para garantizar el suministro de gas ruso hacia territorio ucraniano y comunitario entre el próximo 1 de octubre y finales de marzo de 2016, con lo que se aleja el riesgo de cortes en el flujo durante los fríos meses de invierno.
El acuerdo incluye compromisos de las tres partes implicadas para asegurar el tránsito del combustible ruso.
Ucrania se compromete a comprar en octubre 2.000 millones de metros cúbicos de gas al gigante ruso Gazprom por alrededor de 500 millones de dólares, una cantidad «ya disponible» que ya ha sido facilitada por el Gobierno ucraniano a la gasística ucraniana Naftogaz, que efectuará la operación y usará el combustible para completar las reservas de cara al invierno.
Rusia, por su parte, acepta aplicar un descuento al precio del gas que paga Ucrania hasta niveles similares a los que cobra a los Estados miembro de la UE durante el último trimestre de este año y el primero del año que viene, lo que lo rebajará de 251 dólares a 232 por cada mil metros cúbicos.
La Comisión Europea (CE), que ha actuado de mediadora en esta negociación, ha prometido seguir apoyando financieramente a Ucrania para que pueda seguir comprando gas y asegurando el tránsito hacia territorio comunitario.
En concreto, Bruselas movilizará antes de finales del año una cantidad no inferior a 500 millones de dólares.
El Ejecutivo comunitario ya aprobó el año pasado una asistencia macrofinanciera excepcional a Ucrania de 1.800 millones de euros, de los cuales ya se desembolsó un primer tramo en julio y el siguiente está previsto para antes de finales de año.
El acuerdo «es un paso crucial para asegurar que Ucrania tiene suficiente suministro de gas en el próximo invierno y que no hay amenazas para continuar con el tránsito seguro y de confianza desde Rusia hacia la Unión Europea», sostuvo el vicepresidente de la CE para la Unión Energética, Maros Sefcovic.
Sefcovic explicó que el nuevo paquete de invierno consiste en un protocolo y un anexo al contrato comercial existente entre Gazprom y Naftogaz que asegurará la aplicación práctica del protocolo.