El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha asegurado este lunes que el actual sistema trimestral de subastas eléctricas está «superado» y ha enfatizado la necesidad de «quitar la espina» de unos precios energéticos que lastran la competitividad del país.
«El sistema de subastas tal cual lo conocemos hasta ahora es un sistema ya superado que comporta unos costes que, en términos de cobertura de precios, supone un coste adicional que va a la factura eléctrica», explicó el ministro tras la inauguración del IX Congreso de la Asociación Española para la Economía Energética, en el IE Business School.
Soria dijo que su departamento está «analizando» las propuestas de revisión de precios remitidas por los agentes del sector, incluida la de Endesa, en la que se aboga por subastas mensuales, revisiones trimestrales del recibo y un peso del 50% de las pujas eléctricas en la conformación final del coste de la energía. «El Gobierno está diseñando un nuevo sistema que dé mayor estabilidad a los precios a lo largo de un periodo de tiempo determinado y que también contribuya a que el coste total del sistema pueda ser inferior a lo que es hasta ahora», señaló. Industria estudia «todas las propuestas», no solo la de los operadores, sino también las remitidas por las entidades financieras, explicó el ministro, antes de añadir que se ha reunido además con los consumidores y que lo hará con los comercializadores.
El ministro también insistó en que el precio de la electricidad supone un «coste importante» para los hogares y para las empresas, y repasó el escenario de subidas de los últimos años, del 63% entre 2004 y 2011, y del 2,9% en 2012 y 2013. Durante su intervención en la apertura de las jornadas, Soria dijo que los mayores costes de la electricidad en España con respecto a otros países del entorno son «una espina que hay que quitarse» para mejorar la competitividad. «La política energética no debe ser un factor disminuidor de la competencia» y «cuando el coste de la energía es superior al de los competidores es porque algo no se está haciendo bien», señaló el ministro. Ante esta circunstancia, se mostró partidario de trasladar a la Unión Europea la necesidad de «no exigir extracostes» eléctricos que puedan provocar deslocalizaciones y, dentro del ámbito nacional, defendió la exploración de hidrocarburos no convencionales, a la vista del cambio de paradigma que esta actividad está provocando en Estados Unidos. Las diferencias en los costes eléctricos pueden servir para «entender por qué algunas industrias levantan amarras en unas economías y fondean en otras», añadió.