El presidente francés, François Hollande, y el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, han pactado pedir a la Unión Europea apoyo financiero para varios proyectos de interconexión energética entre ambos países y han abogado por acelerar la aplicación del «plan Juncker» de inversiones.
Hollande y Rajoy presidieron ayer en París la XXIV cumbre bilateral, de marcado carácter económico y en la que han participado una quincena de ministros de ambos países.
El principal acuerdo de esta cita en la capital francesa ha sido el pacto en interconexiones eléctricas y de gas, que como ha explicado Rajoy en la conferencia de prensa que ha ofrecido junto a Hollande, pretende que los proyectos de este tipo sean financiados tanto por el «plan Juncker» como por el actual presupuesto comunitario.
Amparados por el decidido apoyo que el último Consejo Europeo se comprometió a dar a las interconexiones para que la Península Ibérica deje de ser una «isla energética», el presidente francés y el jefe del Gobierno español han impulsado una declaración conjunta con ese objetivo.
Así, pretenden desarrollar interconexiones eléctricas con el fin de alcanzar el objetivo del 10 por ciento en 2020 con España y aumentar las interconexiones de gas (impulsando especialmente el proyecto MIDCAT).
Para ello, pretenden que la Comisión Europea tome medidas urgentes con el fin de movilizar todos los medios y responda con los fondos europeos necesarios para alcanzar los objetivos previstos de forma urgente.
También ha habido un compromiso para seguir desarrollando interconexiones en el campo del transporte terrestre y marítimo.
Pero tanto Hollande como Rajoy han defendido igualmente que el «plan Jucnker» de inversiones se amplifique y se acelere para permitir un mayor crecimiento de la Unión Europea, una cuestión esencial para que los ciudadanos, según ha dicho el presidente francés, comprueben que los esfuerzos tienen frutos concretos.
Esa petición la trasladarán al resto de líderes comunitarios en el Consejo Europeo de los días 18 y 19.
Hollande ha explicado que tanto él como Rajoy han apostado por lograr «una Europa del crecimiento velando al mismo tiempo por los equilibrios financieros», y ha hecho hincapié en que lo que pretenden es que vuelva el crecimiento económico y la creación de empleo.
El presidente francés ha asegurado que, pese a que se sitúe a Rajoy muy cercano a las tesis de la canciller alemana, Angela Merkel, nunca ha tenido la impresión de que haya estado en una posición diferente a la suya en materia de reducción del déficit haciéndolo con la flexibilidad necesaria.
Al respecto, Rajoy ha dicho que tiene buena relación tanto con Merkel como con Hollande y ha puesto el ejemplo de la situación vivida por España para defender que, para reducir el déficit, se actúe en materia de crecimiento y consolidación fiscal «con unos plazos y tiempos razonables».
Rajoy ha aprovechado para destacar la evolución positiva de la economía española y, en particular, los datos en materia de desempleo, momento en el que ha recordado que mañana se conocerán las cifras del paro en noviembre.
Unos datos que ha confiado en que sean positivos pese a que ha resaltado que se trata de un mes tradicionalmente no muy bueno para la creación de puestos de trabajo.
España y Francia han ratificado su colaboración contra el terrorismo y Hollande ha explicado que se ha logrado una experiencia en la lucha contra ETA que puede ser útil contra el yihadismo, la criminalidad organizada y el narcotráfico.
Además, el presidente francés (que ha calificado de «ejemplar» la relación bilateral) ha garantizado que no habrá excepciones penitenciarias en el tratamiento que otorgue su país a los presos de ETA.
Con su homólogo español ha analizado la situación en Mali, Libia, la República Centroafricana, Siria e Iraq, así como la situación del ébola en todo el mundo, cuestión ante la que Rajoy ha vuelto a elogiar la labor de los sanitarios españoles.
Preguntado por la situación en Cataluña, Hollande ha dicho que se trata de una cuestión de política interna española, aunque ha abogado por la estabilidad de España: «Queremos una España estable, fuerte y aliada, como lo es hoy, de Francia».
También ha habido un capítulo especial en la cumbre dedicado a la cultura, que ha dado pie a una declaración en la que se subraya el compromiso de, en el debate europeo sobre los derechos de autor y el mercado único digital, consultarse estrechamente y trabajar sobre propuestas concretas para garantizar una remuneración duradera a la creación cultural y favorecer el acceso de los ciudadanos a las ofertas de contenidos.
Al término de su comparecencia ante los periodistas, Rajoy y Hollande han visitado el Museo Picasso de París, reabierto el pasado 25 de octubre tras cinco años de reformas.