Fuente: El Periódico de la Energía
Polonia es un país dominado por la producción de electricidad con carbón, donde la eólica lleva ya varios años abriendo el camino a las renovables y la fotovoltaica empieza a introducirse. Pero el camino es aún muy largo y los objetivos muy ambiciosos.
Polonia es el país europeo más dependiente del carbón, aunque en Alemania también es importante. El reto de la transición energética y la reducción de las emisiones de CO2 en Polonia pasa por reducir y finalmente eliminar la producción con carbón. Pero partiendo de la situación actual, estos objetivos solamente se pueden plantear en el muy largo plazo. Es por ello que Polonia es uno de los estados que se opone al establecimiento de los objetivos de cero emisiones en 2050 en la Unión Europea, y de momento lo bloquea. Esto es debido a que la desaparición del carbón no solo afectará a su mercado eléctrico, sino también a la economía de las regiones donde la minería del carbón es la actividad principal.
Precios del mercado mayorista de electricidad
El mercado mayorista de electricidad de Polonia, gestionado por TGE, ha tenido históricamente precios relativamente bajos, aunque ligeramente más altos que su vecina Alemania. Como es de esperar, el precio marginal del mercado eléctrico polaco viene determinado por los costes de producción de electricidad con carbón. Esto provoca que el precio en Polonia fluctúe con las variaciones de precio del carbón y de los derechos de emisión de CO2, las dos principales fuentes de costes en las centrales térmicas.
Esa dependencia se ha visto claramente durante el último año 2018. En ese año, el precio del mercado eléctrico aumentó un 42%, respecto al precio de 2017, hasta los 222,63 zł/MWh, que equivalen a 52,16 €/MWh, el precio anual más alto de la historia de este mercado. En ese mismo periodo, el precio de los derechos de emisión de CO2 se dispararon un 171% y el precio del carbón API 2 subió un 10%. También experimentaron incrementos de precio el gas TTF y el petróleo Brent, ambos un 32%.
De cara a este año 2019, si el precio de los derechos de emisión de CO2 continúa cerca de los 30 €/t actuales, el precio del mercado eléctrico de Polonia continuará alto.
Potencia instalada
El parque de producción de electricidad en Polonia está completamente dominado por la capacidad de las centrales térmicas de carbón. Con más de 30 GW, representa el 71% de toda la capacidad nacional y ha aumentado un 15% desde 2017.
Muy por detrás de la capacidad térmica de carbón se encuentra la potencia eólica que, con cerca de 6 GW, representa el 14% del total. La capacidad eólica ha crecido un 55% desde 2015, pero desde 2017 su crecimiento está completamente estancado. La tercera posición la comparten las centrales hidroeléctricas y los ciclos combinados de gas con 2,4 GW cada uno.
La tecnología que está experimentando un crecimiento más rápido en los últimos años es la solar fotovoltaica. Actualmente, el país solamente cuenta con 430 MW, pero con un ritmo de crecimiento de casi duplicar la capacidad cada año durante los últimos tres años.
Mix de generación
Como es lógico esperar con esa distribución de potencia instalada, el mix de generación de electricidad de Polonia está completamente dominado por el carbón. Las centrales térmicas de carbón generaron ni más ni menos que el 75% de toda la electricidad producida a nivel nacional en 2018. Pero hace tan solo cinco años, en 2014, la cota de la producción con carbón llegaba al 80% y hace diez años superaba el 85%.
¿Quién ha desplazado el carbón en estos últimos años? Principalmente ha sido la eólica que, a partir de 2010 cuando su cuota en el mix era de tan solo el 1%, ha ido creciendo año tras año hasta situarse como segunda fuente con el 7% en 2018, aunque en 2017 estuvo cerca del 9%. También el gas ha desplazado el carbón, sobre todo en los últimos tres años, llegando en 2018 al 6% de toda la electricidad producida en Polonia, frente al 2% o 3% que históricamente había representado.
La fotovoltaica, por su lado, ha ido creciendo en los últimos años, pero su contribución al mix es aún muy testimonial. En 2016 su cuota era del 0,1% del total de la electricidad generada en el país, mientras que en 2017 creció hasta el 0,3% y en 2018, hasta el 0,4%.
El panorama del mix de generación de electricidad en Polonia nos muestra, una vez más, la dificultad de la sustitución de la generación convencional por fuentes de origen renovable, debido a la naturaleza intermitente de estas fuentes no gestionables como la eólica y la fotovoltaica. La eólica, con el 14% de toda la potencia instalada, produce tan solo el 7% de la electricidad. Mientras que el gas, con el 6% de la capacidad total, produce el 6% de toda la electricidad en Polonia.