Fuente: El Periodico de la Energía
A falta de escasos dos meses para que finalice el mandato del actual presidente del CSN, Fernando Marti, todavía se desconocen cuáles son los candidatos que el gobierno tiene sobre la mesa para poderle reemplazar. El próximo 29 de diciembre se acaba el periodo de seis años de su presidencia y si no se agiliza ese proceso, podría ocurrir que para entonces no hubiera sustituto y entonces la normativa obligaría a continuar con el mandato de Marti otros seis meses más .
“Nos encontramos entre lo inverosímil y lo kafkiano”, señalan fuentes internas del CSN, “nadie sabe nada y no parece que se mueva nada, es inexplicable que el Gobierno actual esté arriesgando tanto”.
El proceso para la elección del nuevo presidente del organismo encargado de la seguridad nuclear en nuestro país, al igual que el del resto de consejeros, consta de cuatro fases: una primera con las propuestas de candidatos de los partidos, una segunda con la propuesta de los que acepta el Consejo de Ministros, una tercera con la comparecencia parlamentaria ante la Comisión y por último, la aprobación definitiva por parte del Consejo de Ministros.
En total, un proceso que viene a durar alrededor de un mes y medio desde que el gobierno lo inicia, por lo que “si descontamos que el receso parlamentario vacacional que se producirá en torno al 15 de diciembre, a día de hoy estamos en el límite de los plazos para que Fernando Marti deje su cargo como presidente del CSN”, añaden las fuentes.
Pero para ese mismo 29 de diciembre también es necesario conocer el nombre de un nuevo consejero. Marti finaliza su mandato al mismo tiempo que el de Jorge Fabra, que está sustituyendo a su vez a Cristina Narbona.
Con el calendario pisándole los talones al Gobierno, no se ha iniciado la primera fase. De hecho, los grupos parlamentarios todavía no han hecho públicas sus propuestas ni han comenzando a negociar. “No nos hemos reunido aún con el gobierno”, reconoce a este diario Juantxo López de Uralde, diputado de Equo en Unidos Podemos, y portavoz en la Comisión de Transición Ecológica del Congreso, “ya hemos señalado al Gobierno nuestra urgencia en hablar del tema, pero no nos responde”.
“Somos conscientes de la urgencia de los plazos y dejar el CSN en las manos en las que está sería una irresponsabilidad”, añade López de Uralde.
Sin embargo, fuentes de la Ejecutiva socialista confirman a El Periódico de la Energía que “corresponde al Gobierno iniciar el proceso y éste será inminente“.
Pero, ¿por qué están apurando tanto los plazos? Últimamente el Gobierno de Pedro Sánchez se muestra muy tibio en su posición de cerrar las nucleares una vez que finalicen los 40 años de vida útil. Nada más triunfar la moción de censura, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, lo tenía muy claro: confirmaba la voluntad del Gobierno de cerrar el parque nuclear español a medida que las centrales nucleares cumplan sus 40 años de vida útil tecnológica, plazo que se cumple en 2028, en consonancia con el programa del Partido Socialista.