Durante su larga comparecencia ayer ante la Comisión de Industria, Energía y Turismo de la cámara alta, el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, apuntó que «la futura y completa» reforma del sistema eléctrico, que resolverá de «manera definitiva» el problema del déficit tarifa, implicará una «cierta adaptación» del coste de las actividades reguladas (distribución, transporte y renovables, entre otras) «a las condiciones de mercado y de demanda».
Según adelantó Nadal, la futura regulación, que tendrá que aprobarse antes del 30 de junio, deberá dejar «margen para cambiar las reglas que haya que cambiar en función de las circunstancias económicas».
Así, consideró que «la parte regulada del sistema eléctrico no puede quedar al margen de la economía», porque «no puede ocurrir que haya agentes que son retribuidos igual con independencia de la demanda». «En la actualidad, la Secretaría de Estado está repasando todas y cada una de las partes del sistema eléctrico», incluidas las retribuciones del «régimen especial — cogeneración y renovables—, así como del transporte, la distribución» o el mecanismo de ajustes del sistema mayorista, señaló.
Por otro lado, el representante del Gobierno aseguró que se habla de cierta inestabilidad jurídica en el sector, ya que se aprobó un «cierto número de normas» en los últimos tiempos, pero aseguró que mientras persista la inestabilidad financiera habrá cambios regulatorios.
A pesar de ello, Nadal reconoció la necesidad de crear un marco «que dé estabilidad financiera» y regulatoria, previsible para los agentes, pero «revisable y adaptable», es decir, con «revisiones periódicas» conocidas por estos agentes. En su opinión, esto no supone inseguridad regulatoria, porque «se tienen que cambiar las reglas cuando las circunstancias económicas no son las mismas que cuando se dictaron inicialmente».
El objetivo final es la reducción de costes, así como introducir mayor competencia, aseguró durante su intervención.
El déficit de tarifa se ha recortado a la mitad
Asimismo, el secretario de Estado de Energía afirmó que el déficit de tarifa derivado de la propia actividad eléctrica, es decir, si se elimina el coste de financiar la deuda, que ronda los 2.600 millones de euros, «ascendería a entre 1.000 y 1.500 millones de euros».
De hecho, aseguró que este concepto se habría situado en torno a los 8.500 millones de euros en 2012 de no haberse tomado ninguna medida y, sin embargo, se ha reducido a unos 4.000 millones de euros gracias a diversos recortes en la retribución de las actividades reguladas e impuestos a la generación.
En opinión del secretario de Estado, este año se logrará el equilibrio gracias a la aportación extraordinaria de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) a través de la asunción de los sobrecostes extrapeninsulares (1.700 millones de euros) y la concesión de un crédito extraordinario de 2.200 millones de euros.
Sin embargo, Nadal afirmó que se ha «intentado evitar al máximo» que el consumidor tenga que pagar la deuda del pasado con las medidas adoptadas y reconoció que el contribuyente y el usuario eléctrico son lo mismo, ya que todos los españoles pagan impuestos y consumen electricidad, y que al final son ellos quienes pagan el déficit mediante la aportación aprobada en los PGE de 2013. «El Gobierno ha hecho un gran esfuerzo», afirmó, antes de aludir a la «fuerte reducción» de la renta disponible de los hogares.
«Una transferencia continua» de los presupuestos al sistema «no es la solución», porque contribuyentes y consumidores son las mismas personas, dijo. «Hasta ahora, las medidas tomadas, que han sido enormemente importantes, han reducido a la mitad el déficit tarifario, pero queda otra mitad que hay que rebajar para hacer sostenible el sistema», indicó, una cuestión que se pretende resolver de forma definitiva en la reforma que prepara en la actualidad.
Por este motivo, se están «revisando» todos los sistemas retributivos con el fin de ver «qué tiene sentido y qué no» para aplicar «fórmulas más adecuadas que permitan incentivar más competencia» y que permitan una reducción «sustancial» de los costes. Sobre el análisis de las futuras medidas para reducir estos desfases, aseguró que su departamento «habla con las renovables y con todas las partes».
Asimismo, Nadal detalló que a 31 de diciembre de 2012 la deuda tarifaria acumulada desde su creación ascendía a más de 28.000 millones de euros, mientras que el déficit para este año, por el coste que supone el sistema, se incrementará en 2.500 millones de euros en 2012 y en 2.600 millones de euros en 2013.