Fuente: El Economista
El Gobierno acaba de adoptar una batería de medidas que reducirá la presión sobre las industrias que utilizan el gas natural en sus procesos productos como las azulejeras, la alimentación o los fertilizantes. El fuerte incremento de precios del gas – los futuros alcanzan ya casi los 175 euros- les estaba forzando a paralizar su producción y ponía en riesgo la recuperación económica. De hecho, ayer mismo, la patronal Ascer advirtió que se podría ver obligada a paralizar sus plantas.
Con vistas a evitar el impacto que esta situación podría acabar teniendo en el empleo, el Ejecutivo ha decidido ayudar a la industria consumidora de gas a superar la coyuntura de precios elevados. Para ello, el Gobierno ha escuchado la petición realizada por GasIndustrial y ha decidido introducir medidas para flexibilizar las condiciones contractuales del suministro.
Hasta el próximo 31 de marzo las empresas que se vean forzadas a reducir su producción podrán modificar o suspender el caudal contratado para abastecerse de gas natural, evitando así que soporten costes adicionales derivados de las limitaciones vigentes para modificar este tipo de contratos.
GasIndustrial pidió también al Ministerio que adoptara una rebaja de impuestos para el gas natural, pero el Ejecutivo, por el momento, ha desoído esta petición.