El desajuste provisional entre los ingresos y los costes del sistema eléctrico en los cinco primeros meses del año se situó en 1.427 millones de euros, casi 360 millones por debajo de lo previsto, cantidad que tenderá a ajustarse a medida que se incorporen ingresos pendientes de cobro.
Según la quinta liquidación publicada ayer por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el coeficiente de cobertura se situó este mes en el 76,31 %, es decir, que los agentes del sistema cobrarán ese porcentaje de los ingresos reconocidos ahora, mientras que el resto se abonará a medida que haya nuevos recursos disponibles.
La nueva normativa establece que los costes del sistema se pagarán conforme a los recursos disponibles, lo que genera un cierto desfase, sobre todo en los primeros meses, porque los ingresos procedentes de peajes de acceso se suelen recibir con retraso.
La CNMC señala en un comunicado que el desfase ha sido inferior a lo previsto gracias, entre otras cuestiones, a que la demanda eléctrica ha sido un 1,5 % superior a lo previsto, lo que ha repercutido un incremento del 1,9 % en los ingresos por peajes.
En cuanto a los costes, la retribución de las tecnologías de renovables y cogeneración asciende a 2.773 millones, una cantidad que se reduce hasta los 438 millones una vez descontadas las cantidades abonadas de más en liquidaciones anteriores.
En esta liquidación, detalla el regulador, no se han registrado ingresos procedentes de los impuestos a la generación de electricidad ni por subastas de derechos de emisiones de CO2.
En cuanto al sistema gasista, según la CNMC registraba al cierre de mayo un superávit de 11 millones de euros.