Fuente: El Economista
Los precios finales de la electricidad para la industria han experimentado un fuerte volatilidad en los últimos cuatro años, y sólo se han podido contener por la reducción que ha experimentado la potencia contratada, donde se cargan el grueso de los peajes del sistema.
El Grupo ASE elabora desde el año 2012 un índice de precios denominado ASE PTEI (de Precios de Tarifas Eléctricas Industriales) que se basa en 600 puntos de suministro conectados a redes eléctricas de alta tensión en todo el país, con una factura conjunta de 320 millones de euros anuales.
Se trata del único índice que responde a datos reales de contratación de energía, puesto que la empresa se encarga de gestionar sus consumos -una de sus actividades es la agregación de la demanda de sus clientes- y tiene acceso directo a la información. El resto de índices, como los de Eurostat o el INE, se elaboran a partir de cuestionarios, no de datos reales.
A la luz del índice, se aprecia una gran volatilidad de los precios, lo que dificulta enormemente la gestión de la energía en las actividades fabriles. También se refleja con claridad la importante reducción de la potencia contratada que se produce tras agosto de 2013, cuando el Gobierno aumentó los precios unitarios del término de potencia y redujo los del término de energía, provocando una subida global del 7% en los precios industriales de la alta tensión.
Ramón López, gerente del Grupo ASE, es muy crítico con la estructura de formación de los precios eléctricos y la asignación de los costes a los consumidores.
A su juicio, sería mucho más coherente aplicar un sistema de precios basados en la utilización de la potencia contratada, de modo que cuanto más potencia se utilice, menos se pagaría unitariamente por la energía consumida.
Este sistema beneficiaría a la industria, que emplea entre un 35% y un 64% de la potencia contratada en punta, frente a otro tipo de consumidores que tienen mucha potencia ociosa; los hogares, por ejemplo no usan la potencia que tienen en más del 90% de las horas del año.