Fuente: El Periódico de la Energía
Desde el pasado 1 de julio el servicio de interrumpibilidad del mercado eléctrico español ha dejado de funcionar. La última subasta celebrada a finales del año pasado solo abarcaba para los seis primeros meses del año, y el Gobierno ha dejado a la industria sin una de sus subvenciones favoritas que le ayudaba a sobrellevar los altos precios de la energía en España.
Según Red Eléctrica, el servicio de interrumpibilidad es una herramienta de gestión de la demanda para dar una respuesta rápida y eficiente a las necesidades del sistema eléctrico de acuerdo a criterios técnicos (de seguridad del sistema) y económicos (de menor coste para el sistema).
Este servicio se activa en respuesta a una orden de reducción de potencia dada por Red Eléctrica a los grandes consumidores que sean proveedores de este servicio, principalmente, la gran industria.
Aunque no es algo habitual, a veces en el sistema eléctrico hay situaciones en las que no hay suficiente generación para abastecer toda la demanda. Esto puede deberse a una punta de consumo extraordinaria o a una pérdida súbita de generación renovable. Por ejemplo, un cambio brusco de las condiciones meteorológicas puede afectar a la generación renovable.
Ante este tipo de situaciones se cuenta con medidas preventivas. Una de ellas es el servicio de interrumpibilidad: una herramienta que permite flexibilizar la operación del sistema eléctrico desde el lado de la demanda. Los grandes consumidores de energía eléctrica (la gran industria), en respuesta a una orden dada por el operador del sistema, reducen su consumo para mantener el equilibrio entre generación y demanda, para que así al resto de los consumidores no les falte electricidad; percibiendo a cambio una retribución económica.
El servicio ha dejado de funcionar. Así se puede ver en la propia web de Esios de Red Eléctrica.