El Gobierno australiano de Nueva Gales del Sur apuesta por recomprar las licencias de minería de grandes compañías en un intento de apostar por las energías renovables.
Australia es uno de los mayores exportadores de carbón del mundo, pero su relación con este combustible puede verse comprometida tras la decisión del Gobierno australiano de recomprar las licencias de minería y apostar por las energías renovables, aumentando la oposición popular hacia esta industria.
El miércoles, el Gobierno del estado de Nueva Gales del Sur acordó pagar a Shenhua, una compañía china del sector del carbón, 262 millones de dólares australianos (176 millones de euros) por la recompra de las licencias de explotación de carbón, siguiendo una campaña apoyada por granjeros y activistas contra la industria del carbón.
El año pasado, el Gobierno pagó a BHP Billiton 220 millones de dólares autralianos por la paralización de la actividad minera en la región de Liverpool Plains, una zona agrícola rica en carbón.
Fuente: El Expansión