La Asociación Española del Gas (Sedigas) ha instado este martes al Gobierno a acelerar los trabajos para poder transponer la totalidad de la Directiva Europea sobre Eficiencia Energética, y ha considerado que España tiene margen para situarse «a la vanguardia» de Europa en esta materia con el aumento del uso del gas.
Lo ha dicho en un comunicado después de que se haya conocido que más de dos tercios de los países miembros de la Unión Europea podrían ser sancionados por no completar la transposición de esta directiva en sus respectivas legislaciones.
La asociación ha mostrado su satisfacción por el aprobado que ha obtenido España junto con Reino Unido, República Checa y Rumania, pero ha hecho hincapié en la necesidad de transponer la totalidad de la directiva para situarse al nivel de países como Irlanda y Portugal, donde las estrategias están más desarrolladas.
Sedigas ha defendido que el uso del gas canalizado permitiría mejorar la balanza energética de España, un ahorro en el consumidor y mejorar la calidad del aire.
En el uso residencial, ha constatado que el gas tiene rendimientos superiores al 100% en calderas de condensación, y en relación con el gasóleo, el gas produce un ahorro del 30% en el precio del combustible.
En el uso industrial, a través de procesos como la cogeneración, se puede llegar a ahorrar hasta un 20% de la energía que se consume, según Sedigas, que ha añadido que en el caso de viviendas, la cogeneración parte de una ventaja clara porque mejora la calificación energética del edificio.
También ha constatado que en el ámbito de la movilidad, los vehículos propulsados por gas producen entre un 20 y un 30% menos de emisiones de CO2 que los impulsados por gasolina.
La asociación ha subrayado que el gas es la tecnología tradicional más limpia, porque a nivel global reduce las emisiones de CO2 –en un 25% en relación con el petróleo y un 40% con el carbón–, de dióxidos de azufre y de óxido de nitrógeno.