El Proyecto de Ley por el que se establece la financiación con cargo a los Presupuestos Generales del Estado de determinados costes del sistema eléctrico superó ayer su primera votación «al rechazarse las enmiendas a la totalidad presentadas por IU, ICV-EUiA, CHA y por ERC, formación integrada en el Grupo Mixto», comienza la breve nota de prensa publicada en la página de Internet del Congreso de los Diputados.
«Dichas enmiendas se han votado de manera conjunta con 18 votos a favor, 191 en contra —del PP, CiU, Unión del Pueblo Navarro (UPN) y Foro Asturias (FAC)— y 95 abstenciones», continúa el texto del comunicado, en el que a continuación se detalla que el mencionado proyecto de ley, que fue defendido por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, «continuará de este modo su tramitación en la Comisión de Presupuestos, donde se debatirán y votarán las enmiendas al articulado».
La normativa que defiende el Gobierno establece «la financiación con cargo a los Presupuestos Generales del Estado de determinados costes del sistema eléctrico, ocasionados por los incentivos económicos para el fomento a la producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energías renovables, y para el que se concede un crédito extraordinario por importe de 2.200.000.000 de euros en el presupuesto» del Minetur.
Los defensores de las enmiendas que no han salido adelante explican que la propuesta reguladora del Gobierno es un «nuevo parche», y exigen una reforma integral del sistema energético que no «demonice» a las energías renovables.
Durante el debate, tanto los representantes de Izquierda Plural como los del Grupo Mixto acusaron al Ejecutivo de actuar en exclusiva «en defensa del oligopolio» eléctrico e insistieron en pedir una auditoría pública de la deuda eléctrica que permita conocer sus «costes reales».
En sus intervenciones, la oposición cuestionó que, con una caída de la demanda eléctrica del 20 % desde 2008 y un exceso de capacidad instalada del 60 % a finales de 2012, los pagos por capacidad para garantizar el suministro hayan aumentado un 402 % en los últimos cinco años. Sin embargo, el apoyo recabado de Amaiur, el BNG, CC-NC y Compromís-Equo no fue suficiente para sacarlas adelante
Por su parte, el titular de Industria solicitó a los diputados durante su comparecencia en el Congreso que secundaran la aprobación del préstamo extraordinario con cargo a las cuentas públicas que recoge el proyecto de ley y que persigue afrontar el coste de las renovables.
«Enésimo parche al sistema eléctrico»
Desde la oposición, el diputado del PSOE José Segura explicó que su grupo no se opondrá a la tramitación de la norma, pero pidió a la Cámara Baja que acepte unas enmiendas «razonables», entre ellas la de que el crédito de 2.200 millones no se justifique a partir de la necesidad de financiar las renovables, sino de financiar el conjunto del sistema eléctrico. «Las nuevas directrices comunitarias de ayuda de Estado pueden hacer que la Comisión Europea sancione al Gobierno español al considerar ayuda las primas a las renovables y obligar a los perceptores de primas a su devolución» en caso de que el préstamo se destine a financiar con cargo a las cuentas públicas estas tecnologías, señaló.
Otras voces detractoras de la propuesta normativa calificaron de «ilegítima la deuda con las eléctricas» y cargaron contra los «beneficios inmorales» de estas empresas, en el caso de la diputada de ERC, Teresa Jordá, quien también lamentó que se «den 2.200 millones a las eléctricas a costa de las cuentas públicas en un momento en el que se recorta en educación, sanidad y pensiones». «No nos vendan la moto de que lo hacen por el bien del consumidor».
Por su parte, la diputada de la Izquierda Plural Laia Ortiz consideró que la medida supone el «enésimo parche en el sistema eléctrico» y lamentó que se atribuyan «a toda la ciudadanía los costes» de la tarifa eléctrica. A su juicio, desde 2005 el ahorro que supusieron las renovables duplicó el gasto en primas que, recordó, «no son subvenciones», sino inversiones para permitir generar energía a un coste muy bajo.