La Unión Europea, necesitada de reforzar en lo posible sus distintas fuentes de abastecimiento de recursos energéticos de manera que sus necesidades estén garantizadas y se reduzca así su vulnerabilidad en esta materia, cerrará este domingo un acuerdo con uno de sus proveedores principales: Argelia.
En concreto, el presidente de la Comisión Europea, Joao Durão Barroso, y el primer ministro argelino, Abdelmalek Selal, firmarán un «memorando de entendimiento sobre el establecimiento de una cooperación estratégica entre la Unión Europea y Argelia en el sector de la energía», comunicó la portavoz comunitaria Pia Ahrenkilde en una rueda de prensa.
Este paso tendrá lugar en el marco de la visita oficial del dirigente comunitario a la nación norteafricana, y según la portavoz, «lo que es importante es transmitir el mensaje claro de que la intención de la Unión Europea es mantener relaciones intensas con Argelia, que es considerado un socio muy importante para nosotros». Así, Barroso buscará dar impulso a «todas las cuestiones pendientes», entre las que es especialmente relevante la rúbrica del memorando de entendimiento sobre energía, que busca reforzar las relaciones entre ambos socios en este campo.
El acuerdo establecerá una mayor cooperación en cuestiones «de interés común», como los hidrocarburos, las energías renovables, la eficacia energética, el desarrollo de infraestructuras y una «mayor integración progresiva de nuestros mercados de energías». «Argelia es un gran proveedor de gas natural y Europa es de lejos su principal cliente, por eso compartimos una relación estratégica importante», aseguró la portavoz.
Este convenio supondrá para el sector de las renovables «un área en la que nuestro potencial de cooperación es muy grande», y también es signo de la enorme relevancia que tiene para la Unión Europea aumentar la seguridad y sostenibilidad de sus fuentes de energía. El sector energético es «extremadamente importante y prioritario» dentro de la Unión para la zona del Mediterráneo, que integran países de la UE, norteafricanos y de Oriente Medio, como Argelia, subrayó la portavoz comunitaria.
La energía «es un elemento fundamental dentro de la construcción de una zona compartida de prosperidad y estabilidad», defendió Ahrenkilde.
Otra cuestión de mayor complejidad que será planteada durante el viaje de Barroso a Argelia es el reconocimiento del «importante rol» que el país juega en la región desde el punto de vista político, «especialmente en la situación actual».