La Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica (Anpier) alerta de que el sistema bancario tendría un «agujero» de 18.000 millones de euros asociado a la «quiebra fotovoltaica» que las entidades «no estarían provisionando».
Esta falta de valoración de riesgos, indica la patronal, supone una «grave contingencia» con la que la Unión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de España deberían contar a la hora de garantizar unas provisiones suficientes en el sistema financiero español.
Desde esta asociación sectorial, que representa a 55.000 inversores particulares que apostaron por la energía fotovoltaica, consideran que la banca española, con la que sus asociados suscribieron la mayor parte de los créditos, debe realizar «un ejercicio de absoluta transparencia» durante la visita que están realizando los técnicos de la “troika” para conocer la situación real del sistema financiero.
«Ni la Comisión ni el Gobierno consideran necesario pedir más dinero para inyectar a la banca más allá de los 40.000 millones de euros utilizados, pero desde Anpier se alerta de que podríamos cerrar en falso el problema asumiendo unas consecuencias nefastas para el sistema bancario español, la recuperación económica y la necesaria obtención de liquidez por parte de empresas y ciudadanos», explican los responsables de la patronal.
Asimismo, recuerdan que la banca española ya cometió el «grave error de no valorar de manera rigurosa sus activos y riesgos de morosidad», lo que generó «una espiral» en forma de crisis financiera y de confianza que solo quedó paliada con la intervención de la Unión Europea y el rescate bancario que se implementó el pasado año.
En opinión de Anpier, para lograr un diagnóstico «certero» sería necesario realizar una provisión adecuada de los activos fotovoltaicos, si bien sospecha que los bancos no están asumiendo los riesgos asociados a la «previsible quiebra del 80 % del sector».
Todo este porcentaje de actividades «no puede hacer frente a sus créditos», lo que haría que los parques en manos de la banca carecerían de valor a los pocos días, puesto que «sin seguridad y mantenimiento quedarían mermados de manera irreversible».
Tal y como reconoce la entidad que preside Miguel Ángel Martínez-Aroca, los 55.000 particulares a los que representa Anpier han «hipotecado todos su ahorros» animados por la normativa de 2007, si bien desde 2010 sufren «dos disposiciones retroactivas», que son el Real Decreto 1565/2010 y el Real Decreto Ley 14/2010, que suponen una merma de hasta el 30 % de los ingresos, a la que se añade el impuesto del 7 % de la facturación (Ley 15/2012) y la no actualización de las tarifas conforme al IPC.
Las medidas aprobadas en los RDL mencionados elevan los recortes al 40 %, incide la Asociación, que advirtió además de que «el Gobierno amenaza con un quinto recorte que supondría, por leve que este fuera, el colapso financiero inmediato del 80 % del sector fotovoltaico español», que es el que «ha requerido de financiación bancaria».