La industria de la cogeneración reclamó ayer al próximo Gobierno un marco normativo que dé confianza y la puesta en marcha de un «plan renove» para sus instalaciones que conllevará una inversión de 1.500 millones en cinco años e impulsará un 10 % la producción industrial.
Según señaló ayer el presidente de la patronal del sector Acogen, Antonio Pérez, la cogeneración es clave para el «relanzamiento» industrial de España y la recuperación económica y por ello necesita ayudas y un marco normativo estable que facilite esa renovación.
Las instalaciones de cogeneración están en empresas de sectores como el papelero, el químico, el refino, el automóvil o el textil y sirven para generar calor y electricidad que se usa tanto para fabricar en sus plantas como para verter a la red. El 20 % del PIB industrial de España se fabrica con cogeneración.
«Confiamos en que tras las elecciones del 20-D la industria sea un prioridad», subrayó Pérez, y reclamó al próximo Gobierno «un marco normativo que dé visibilidad y confianza» y ese plan renove para «entrar en un nuevo ciclo inversor» que lleve a una cogeneración «más eficiente y flexible».
Pérez señaló que, aunque el 40 % del sector «se ha quedado en el camino» en estos años de crisis, la cogeneración, con 6.000 megavatios (MW) de potencia instalada, sigue produciendo el 10 % de la electricidad española atendiendo las necesidades de energía térmica de 600 industrias y consumiendo el 22 % del gas natural.
Y concluyó que se inicia un nuevo ciclo tras la etapa de ajuste con ese plan que servirá para renovar unos 2.500 MW.
En una posterior mesa redonda, representantes de distintos partidos políticos (Ciudadanos, PSOE, PP, Unió y Convergencia) coincidieron en la importancia que tiene la cogeneración en la industria y su papel clave en la eficiencia energética.
Desde Ciudadanos, David López destacó su «apuesta decidida por la cogeneración» al igual que desde el PSOE, con Pilar Lucio, se defendió de la necesidad de rediseñar la estrategia energética española «escuchando a todas las partes» tras unos años centrados solo en acabar con el déficit de tarifa sin medir los «efectos colaterales».
También coincidieron en la importancia de intentar alcanzar un pacto de estado en materia energética aunque cada partido marcó sus «líneas rojas».
Desde Unió, Antonio Picó señaló entre esas líneas la seguridad de suministro, la competitividad de precios y, especialmente, la estabilidad normativa que dé seguridad económica.
Desde el PSOE reclamaron más «consenso frente al disenso actual» y no volver atrás en la lucha contra el cambio climático.
Desde CiU, Mercé Rius reconoció que un pacto nacional «es deseable, pero poco probable» y también insistió en la necesidad de recuperar seguridad jurídica y la confianza de inversores, un punto en el que también coincidió Ciudadanos.
Desde el PP, Encarnación Jiménez defendió la reforma y los esfuerzos hechos por el Gobierno para la sostenibilidad del sector eléctrico y apostó también por un pacto de estado de cara a la próxima legislatura.
Acogen, que ayer celebró su asamblea general, ha entregado también sus galardones «cogeneradores de honor 2015» a los periodistas económicos Carmen Monforte y Rubén Esteller.