FUENTE: El Economista
La Comisión Nacional de Mercados y Competencia dio a conocer anteayer el informe sobre la retribución a la distribución, que tal y como adelantó este diario fue aprobada la semana pasada sin cambios importantes en el coste total de la propuesta que presentó el Ejecutivo.
De este modo, la Orden calcula una retribución de 4.740 millones para las grandes distribuidoras, incluyendo Begasa y Conquense, lo que supone un 2% más. Para las empresas con menos de 100.000 clientes, dicha cantidad se situaría en el entorno de 348 millones de euros, lo que supone un incremento del 5%, según las cuentas de Industria.
Pese a esta situación, el consejero de la CNMC, Josep María Guinart, lamenta en un voto particular algunos de los cambios que se han realizado en la última propuesta, aunque finalmente su voto sobre la misma ha sido favorable. De entre ellas, destaca el aumento del coste unitario de las líneas de baja tensión subterráneas de doble circuito, es decir, aquellas que se utilizan principalmente en grandes ciudades y cuya propiedad generalmente recae entre las grandes empresas eléctricas.
El Gobierno propone un incremento del 22% para estas redes, que se compensa con un ajuste adicional en el que se reducen los valores unitarios del resto de activos (posiciones de subestación, centros de tranformación, etc). A juicio del consejero, esta modificación ?no está argumentada, ni justificada, ni obedece a ninguna lógica técnica ni económica?.
Guinart, además, asegura que las modificaciones de la CNMC no son necesariamente mejores que la propuesta del Ministerio y lamenta que Industria no contemple en la metodología las situaciones de la distribuidoras (zonas rurales, dispersas o la orografía) y pide un régimen singular para las empresas con menos de 100.000 clientes, de modo que haya una suficiencia de costes dada la gravedad de la caída de ingresos que puede provocarles. Para ello, pide que puedan contrastar ante el Ministerio de forma individual los parámetros con sus costes reales con la supervisión del propio supervisor.
La CNMC, por su parte, considera que el incremento de un 10% de los valores unitarios de referencia, tanto de inversión como de operación y mantenimiento, de las líneas de múltiples circuitos (más de 1), cuyo objeto es incentivar el uso intensivo de los pasillos eléctricos, no debería ser aplicado en ningún caso a las instalaciones ya existentes, sino única y exclusivamente a las que se pongan en servicio a partir de 2016 para evitar que se prime a través de este incentivo de carácter medioambiental, a las instalaciones que se ejecutaron en el pasado por razones técnicas.
El regulador recomienda que se incorpore a la Orden un nuevo artículo en el que se establezcan los parámetros técnicos y económicos que se van a utilizar para el cálculo de la retribución de las distribuidoras. Por ello, y en base a la información disponible en la CNMC, se propone incorporar al texto la vida útil regulatoria de las distintas instalaciones de distribución.
Con esta orden, el Gobierno ya puede preparar la tarifa de 2016.