Iberdrola está estudiando vender algunos de sus «activos relevantes», según ha comunicado la eléctrica este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tras las informaciones que apuntan a que está sondeando al mercado para deshacerse de su división de distribución.
«Iberdrola está analizando diferentes alternativas de desinversión de sus activos. Hasta la fecha, Iberdrola no ha adoptado ninguna decisión al respecto. En caso de que los órganos de administración de Iberdrola acuerden llevar a cabo desinversiones de alguno de los activos relevantes de Iberdrola, se procederá a comunicar dicho acuerdo», afirma la empresa que dirige Ignacio Sánchez Galán en la nota remitida al supervisor.
La empresa anunció tras presentar sus resultados de 2013 que va a reducir sus inversiones en España a resultas del aumento de las cargas regulatorias introducidas por la reforma del Gobierno.
Según informa este martes El Confidencial, una de las medidas que han puesto en marcha en respuesta al cambio normativo es la venta de su división de distribución. Esta es la unidad que se encarga de transportar la electricidad desde las centrales en las que se produce hasta los núcleos urbanos y demás usuarios.
Por otra parte, Iberdrola ha anunciado en otro comunicado enviado a la CNMV de que ha reconfigurado tres créditos sindicados que sumaban un importe total de más de 3.200 millones de euros en uno único de 2.000 millones de euros a cinco años. El pacto lo ha suscrito un sindicato de entidades financieras españolas y extranjeras.
Dentro de esta operación figuran un crédito suscrito el 8 de julio de 2010 por importe de 2.150 millones de euros y los préstamos a Iberdrola International B.V. de mayo de 2012 por 161 millones y 838 millones de euros —este último aumentado a 927 millones en julio—.
El nuevo crédito consta con un primer tramo en el que Iberdrola es la entidad acreditada y de un segundo en el que Iberdrola Financiación es la acreditada. Este último tramo, además, cuenta con la garantía incondicional e irrevocable de la eléctrica. En cuanto al vencimiento, la empresa puede solicitar la extensión del plazo del primer tramo por uno o dos años adicionales, sujeto a la aprobación de los prestamistas.