España ha destinado hasta ahora más de 50.000 millones de euros en subvencionar las energías renovables y otras instalaciones de régimen especial.
El coste de las subvenciones es una de las informaciones que se desprenden de la memoria que acompaña al borrador de orden ministerial por el que se regularán los parámetros con los que el Gobierno pretende imponer un nuevo régimen de primas a las energías verdes.
La memoria económica detalla que desde el año 1998 hasta el año 2013, »los incentivos económicos a las instalaciones de producción de energía eléctrica mediante fuentes de energía renovable, cogeneración y residuos, han ascendido a más de 50.000 millones de euros, incrementándose en más de un 800 por ciento desde el 2005 hasta el año 2013, dónde las primas a dichas instalaciones alcanzan aproximadamente 9.000 millones de euros».
El borrador de orden ministerial ha sido remitido a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia y supone un duro ajuste en las retribuciones que recibirán a partir de ahora las renovables. Muchas de ellas se van a quedar, de hecho, sin primas.
En concreto, un ejemplo son las instalaciones eólicas que obtuvieron su autorización antes de 2005, y que dejaran de percibir retribuciones específicas «por haber superado la rentabilidad razonable», en virtud de los nuevos parámetros propuestos por el Gobierno. En un extensísimo documento, el Gobierno detalla cientos de parámetros y estándares en los que se basa el nuevo marco retributivo para el régimen especial que tendrá aplicación desde julio de 2013 y con el que se prevé ahorrar 1.750 millones este año.