El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, y la vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Agenda Digital, Neelie Kroes, llegaron ayer a un acuerdo sobre el regulador único que plantea crear el Gobierno español. Este persigue aglutinar las competencias de siete entidades supervisoras, todas a excepción de las relacionadas con los mercados financieros: la Comisión Nacional de Energía (CNE), la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), la Comisión Nacional de la Competencia (CNC), la Comisión Nacional del Sector Postal (CNSP), el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales (CEMA), la Comisión de Regulación Económica Aeroportuaria, la Comisión Nacional del Juego y el Comité de Regulación Ferroviaria (CRF).
Este anuncio llega después de las advertencias realizadas por Bruselas al Ejecutivo de Mariano Rajoy para que elevara las garantías de independencia del nuevo organismo y corrigiera aquellos aspectos que, desde su óptica, «infringen la letra y el espíritu del derecho comunitario europeo», aseguró recientemente Kroes.
Así, la responsable comunitaria advirtió de que si España no modificaba su propuesta legislativa, «la Comisión no tendría más opción que abrir un procedimiento de infracción si la normativa se adoptara sin cambios sustanciales relativos a la independencia y las funciones del regulador».
Kroes matizó entonces que el Ejecutivo comunitario no está en contra de «reguladores integrados», pero que «la integración no puede ser una excusa para deshacerse de reguladores independientes antes del término de su mandato o para eliminar funciones clave de supervisión de mercados».
Pero tras el encuentro mantenido ayer entre Soria y Kroes en el marco del Congreso Mundial del Móvil que se celebra en Barcelona, quedó patente que se han efectuado las modificaciones exigidas por la CE, lo que ha conducido a que la propia directiva europea anunciara: «hemos llegado a un acuerdo».
Por su parte, el titular español del Minetur explicó que el regulador único contará con dos secciones: una de competencia y otra sectorial, y añadió que tendrá independencia presupuestaria.
Cabe mencionar que el pasado mes de diciembre, el ministro de Economía, Luis de Guindos, afirmó que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) empezaría a funcionar a partir del próximo verano, y su puesta en marcha podría suponer un ahorro de unos 28 millones de euros, según las estimaciones más conservadoras.
Asimismo, Guindos avanzó que el calendario de tramitación que se fijó preveía que la aprobación definitiva de la norma, que aún tiene que someterse al debate de enmiendas parciales, tendría lugar en la primera quincena de marzo. El siguiente paso consistirá en la puesta en marcha del nuevo supervisor mediante la formalización de los trámites de nombramiento de sus responsables y la aprobación del reglamento y el estatuto orgánico, lo que conllevará unos cuatro meses. «Hay que destacar el reducido plazo de tiempo», advirtió el ministro, que fijó la entrada en vigor de la CNMC para el próximo agosto.
Las estimaciones realizadas desde el Gobierno avanzan que el impacto presupuestario será «positivo», ya que los altos cargos pasarán de los 50 que actualmente se reparten por los siete organismos que se fusionarán a los nueve que tendrá la nueva institución, lo que conllevará 4,2 millones de euros menos de gasto anual. También habrá un ahorro en el gasto de funcionamiento por valor de 6 millones de euros.