El Ministerio de Energía publicó el sábado parte de la normativa que desarrolla la próxima subasta de renovables con dos importantes cambios: las ayudas a la fotovoltaica bajan un 22% y las horas exigidas a la eólica suben un 7%.
En los borradores previos a la publicación de la nueva normativa, la Orden ETU 315/2017, la fotovoltaica aspiraba a recibir unas ayudas máximas de 50.507 euros por MW instalado, pero en el texto oficial esa cantidad se ha reducido hasta los 39.646 euros por MW, es decir, un 22 por ciento menos.
El cambio deja a el umbral de ayudas a la energía fotovoltaica por debajo del umbral de la eólica, que sigue aspirando a un máximo de 47.684 euros por MW. Se trata, por lo tanto, de una modificación trascendental de las reglas de concurso, puesto que incrementa las posibilidades de que los proyectos de la energía solar ganen las pujas.
Curiosamente, el viernes de la semana pasada se supo que una de las patronales de la energía fotovoltaica, Unef, había aprobado recurrir al Tribunal Supremo para que suspendiera cautelarmente la celebración del concurso, argumentando que la fotovoltaica resulta discriminada frente a la eólica.
La eólica, por otro lado, tampoco queda igual, puesto que las horas de operación anuales del proyecto-tipo de referencia (con el que se comparan los proyectos de los concursantes) también se han modificado, pasando de 2.800 a 3.000, lo que hará más difícil alcanzarlas.
Otros elementos importantes de la subasta, como los avales exigidos o la rentabilidad razonable estimada durante la vida útil de las instalaciones ganadoras no han experimentado modificaciones.
Fuente. El Economista