Endesa «siempre» está «abierta y dispuesta» a colaborar en la búsqueda de soluciones a los problemas del sector energético, ha manifestado el Consejo Asesor de la eléctrica en Aragón a través de un comunicado de prensa en el que expresa su preocupación y desacuerdo con las recientes declaraciones realizadas por el secretario de Estado, Alberto Nadal. En concreto, este aseguró en su comparecencia del pasado día 21 de marzo ante la Comisión de Industria del Senado que existía cierta dificultad a la hora de mantener un diálogo fluido con Endesa en asuntos energéticos relevantes, debido a que su principal accionista es de una nacionalidad distinta a la española, en concreto, la italiana.
A pesar de que el ministro de Industria, Energía y Turismo ha asegurado que Nadal transmitió sus disculpas a los directivos de Endesa por la polémica que suscitaron sus palabras, desde la eléctrica han querido dejar clara su posición de que «siempre ha estado abierta y dispuesta a colaborar en la búsqueda de soluciones a los problemas del sector, a través de un diálogo franco y desde la responsabilidad que le confiere su liderazgo, estableciendo relaciones de confianza y lealtad con todos los interlocutores institucionales y sociales con los que se relaciona», subraya la nota divulgada por el Consejo Asesor de la energética integrada en Enel.
En sus declaraciones ante la Cámara Alta hace unos días, Nadal apuntó que el «diálogo» con la eléctrica, que es «clave» en la quema del carbón nacional, «no es fluido» debido a que esta empresa es extranjera y está participada por un Estado de la UE. Endesa, en la que la italiana Enel tiene una participación del 92 %, opera las centrales térmicas de carbón de mayor potencia del país.
Por su parte, los integrantes del Consejo Asesor de la entidad que preside Borja Prado inciden en que han dado «sobradas» muestras a lo largo de su historia de «su mejor disposición a mantener un diálogo constructivo con la Administración sobre cualquier tema regulatorio, y su actitud hacia estas cuestiones no se ha diferenciado de la de otras empresas del sector: plena disposición al debate, con el fin de alcanzar soluciones positivas, y defensa de los legítimos intereses empresariales».
«Hacer discriminación al respecto, sobre la base de que los principales accionistas de cualquiera de estas empresas pertenecen a otros países miembros de la Unión Europea, no solo es injusto, sino francamente insólito en el actual contexto político y económico», recalca el comunicado. El texto continúa exponiendo que, de la misma manera que otras empresas del sector, Endesa no ha hecho otra cosa en los últimos meses que expresar su desacuerdo con medidas regulatorias, aprobadas o anunciadas, que considera perjudiciales para la sostenibilidad del sistema eléctrico y la seguridad del suministro, y mostrar su mejor disposición a plantear soluciones alternativas que reviertan de forma mucho más beneficiosa en el interés general.
«Desde hace décadas, nuestra compañía mantiene un contacto permanente y fluido con las administraciones y órganos reguladores, centrales y autonómicos, que intervienen en las actividades que desarrolla, lo que ha servido para conducir con éxito las diversas situaciones y escenarios que se han ido produciendo», aclaran los responsables de la eléctrica.
«Quid pro quo»
Asimismo, se han mostrado de acuerdo con que se exija a las eléctricas que asuman sus obligaciones, pero, del mismo modo, «las distintas administraciones deben prestarles una colaboración imprescindible en forma de normas claras y eficientes que generen certidumbre y confianza y sienten las bases para que puedan continuar siendo catalizadoras del desarrollo de los mercados en los que están presentes, en un contexto de notables dificultades económicas, sociales y sectoriales».
El Consejo indica en la nota difundida que los datos que presta la compañía periódicamente demuestran que Endesa ha realizado de forma continuada un esfuerzo inversor «elevado, creciente y proporcionado, mayor que el de cualquier otra eléctrica en España». En este sentido, el grupo ha invertido 1.400 millones de euros en nuestro país en diversas acciones relacionadas con las actividades de generación, distribución y comercialización. Suministra electricidad y gas a doce millones de clientes, de los que más de 900.000 son aragoneses.
«La apuesta de la compañía y de su principal accionista, el Grupo Enel, en nuestra comunidad está suficientemente contrastada a lo largo de este periodo. No estamos en el territorio, si no que formamos parte de él. De este y de todos», matizan los directivos de la eléctrica.
Actualmente, Endesa emplea a 755 trabajadores directamente en Aragón, mientras que proporciona trabajo a otros 4.000 de manera indirecta.
Peso en la minería
En cuanto a la presencia de Endesa en el sector minero nacional, desde la compañía clarifican que se trata de la única empresa española que ha desarrollado de forma continuada planes de reindustrialización en sus zonas mineras. Dentro de este marco, se encuentran la Fundación Andorra y el Plan Económico de Andorra (Pean), promovido por la compañía, el Gobierno de Aragón y las centrales sindicales, con el objetivo de crear las condiciones necesarias para la captación e implantación de industrias generadoras de empleo alternativo a la minería del carbón en la zona.
A través de esta iniciativa, se han desarrollado 49 proyectos con una inversión de casi 120 millones de euros y se han creado 619 puestos de trabajo. Además de esto, también se han dedicado recursos a compromisos medioambientales, como la restauración del impacto ecológico causado en las cuencas mineras, la plantación de más 500.000 árboles desde el inicio de los trabajos o los proyectos de conservación de la Avifauna, en colaboración con la Consejería de Medio Ambiente.
Otro aspecto importante del compromiso de Endesa con Aragón, según el Consejo, es «su implicación en el desarrollo tecnológico de la región, dentro del cual se enmarca el convenio de colaboración para la promoción de actividades de investigación, desarrollo e innovación firmado con el Gobierno autonómico».
En cuanto a la valoración que realiza la firma energética de los pasos que el Gobierno está dando en materia de regulación, los responsables de Endesa dejan claro que «no puede dejar de calificar como inadecuados los objetivos que se declaran buscar, que no atacan la raíz de los problemas y que no ofrecen respuesta a los efectos secundarios indeseados que tales iniciativas están y van seguir produciendo».
En este sentido, el Consejo considera que es lógico que, además, la compañía muestre su «inquietud» por los «primeros síntomas anunciados» de lo que «podría ser la reforma sectorial que el Gobierno se plantea llevar a cabo, y que parece no tener en consideración, por ejemplo, que España presenta uno de los sistemas retributivos de la distribución eléctrica más bajos de Europa».
Por último, espera y «desea» que «las medidas que pueda contener el nuevo marco regulatorio contribuyan a despejar las incógnitas que se ciernen sobre el desarrollo de nuestras propias actividades y sobre las actividades de las empresas ligadas a nuestra compañía en Aragón».